Bienes Raices

Los pisos de madera generan una atmósfera cálida y confortable a cualquier habitación, además de que si se les dan los cuidados adecuados tienen una larga vida. Van bien con todas las habitaciones de una casa pero hay que cuidar que el espacio elegido esté protegido de las filtraciones de agua, la humedad y la luz directa del sol. Existen tres clases principales con los que se conocen las distintas formas de colocar un piso de madera y a continuación vamos a mencionarlos, así como las formas más comunes de protegerlo.

El entablonado consiste de tablas largas que se colocan paralelas las unas a las otras. El ancho común de las tablas es de 8 o 9 cm., aunque las hay de muchos otras medidas, mientras que el largo de las tablas suele ser de alrededor de un metro. Las tablas pueden ir clavadas al suelo o pegadas con algún adhesivo al piso o la base. Se llama entarugado una forma especial de entablonado en la cual las tablas van clavadas al suelo con tornillos pero rematadas por tapas que quedan a la vista, generalmente en algún color contrastante pero armónico con el de la madera.

Por otra parte, el parquet consiste de tablas más cortas que se colocar de una forma determinada para crear un diseño en el suelo. Éstas tablas se clavan o pegan al suelo como en el entablonado, aunque por ser de mucho menor tamaño significan más trabajo al momento de colocarlo. Éstas tres clases de colocación llevan una protección en los bordes donde la madera toca la pared, la cual tiene la finalidad de evitar que la humedad se filtre a las tablas, provocando quebraduras.

Hay varias maneras de proteger la duela. La más común es el pulido, mediante el cual un piso maltratado puede volver a lucir como nuevo, aunque lo malo es que las tablas se adelgazan con el tiempo. Después de una pulida, se puede barnizar el piso y si se desea también cambiar su color.

El plastificado consiste en una capa de barniz de aceite que provoca un efecto visual semejante al del plástico, aunque no lo es. Se trata de una cubierta a base de aceite que protege el piso de las manchas y de las rayaduras, aunque no tanto como para considerar que se pueden arrastrar muebles por todo el piso. La protección que ofrece es muy alta aunque a algunas personas no les gusta pues queda parecido a la duela artificial. El llamado hidrolaqueado es una forma especial de barniz pero éste a base de agua.