Bienes Raices

¿Eres freelancer y buscas comprar casa propia? Hasta hace algunos años, los trabajadores no asalariados que, por ende, no reciben prestaciones ni tienen un sueldo fijo, no eran sujetos atractivos para que un banco les otorgara un crédito hipotecario. Sin embargo, ante el incremento de trabajadores freelance, las instituciones financieras y otras entidades han desarrollado productos para este sector de trabajadores, y a continuación te los contaremos para que adquieras el hogar de tus sueños.

• Créditos bancarios. Para obtener un préstamo hipotecario se requiere tener un buen historial crediticio para darle seguridad al banco de que se cumplirán los pagos en tiempo y forma; estos créditos son los más buscados, especialmente porque con ellos se pueden adquirir inmuebles de todo tipo: locales comerciales, terrenos, o destinarse el dinero para la construcción. Además del historial crediticio se requiere un comprobante de flujo de ingresos, que puede ser a través de las facturas o recibos de los servicios, a modo de comprobante de ingresos.
• INFONAVIT. La institución ha creado el programa “Crezcamos Juntos”, que permite a los trabajadores freelance cotizar y solicitar un crédito para adquirir casas nuevas o usadas. Para solicitar este programa se necesita estar dado de alta en el SAT, como parte del Régimen de Incorporación Fiscal (RIF), así como en el sistema de ahorro Bansefi, Banco de Ahorro Nacional y Servicios Financieros. Posteriormente se requiere consultar la herramienta de precalificación para crédito seguro de la institución, con lo que se puede determinar cuánto dinero se debe ahorrar mensualmente, que corresponde a una suma aproximada del 10% del salario mensual.
• SOFOM. Las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple, registradas en la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) son otra buena opción para solicitar un crédito hipotecario, para lo cual es necesario dirigirse a la Hipotecaria Federal (SHF) y registrarse en el programa “Crediferente”, tener entre 18 y 69 años de edad, contar con buen historial crediticio, algún comprobante de ingresos y realizar un avalúo del inmueble a comprar. Estos programas cuentan con plazos de 5 a 25 años, con un enganche mínimo del 10% del monto del inmueble.

Ser freelance no está peleado con la adquisición de inmuebles, la clave está en el ahorro económico y en la disciplina para pagar en tiempo y forma los productos crediticios adquiridos, así que este es el mejor momento para que comiences a ahorrar para dar el enganche del hogar de tus sueños.